“Y veremos cosas peores”, es un dicho que se menciona cuando damos a conocer un hecho inaudito y que pueden presentarse sucesos con mayor impacto.
Así será esta campaña electoral, pues los trolles han empezado a hacer de las suyas y al no dar la cara, se escudan en personajes siniestros que a través de insultos tratan de desmerecer lo que hacen los medios de comunicación o sus posibles contrincantes.
Cuando se inicia la campaña electoral, vemos amorosos candidatos que dan a conocer sus propuestas, como sueños de opio, que tampoco ellos se las creen.
Pero escucharemos de todo, veremos de todo y nos proyectaremos a ciudades y regiones maravillosas, pero cuando reciben las críticas ahí veremos sus verdaderas personalidades y eso hay que tener en cuenta… muy en cuenta.
Muchos “trapitos sucios” vamos a ver tendidos en esta campaña, pero al final es la ciudadanía quien tendrá la responsabilidad, como siempre, de elegir a quienes nos representarán en las municipalidades y gobernación regional.
Las redes sociales, ya se convierten y son desde siempre los espacios donde los cobardes darán a conocer “su punto de vista”, pero no del candidato, sino de la crítica que se haga de él, el ventilador estará preparado para botar tanta cochinada que harta, pero que denigra más a quien defiende que a quien ataca.
Cuidado con la impertinencia, que el tiro puede salir por la culata, que tratando de defenderse a través de insultos lo único que lograrán desprestigiarse, pero si eso sirve para conocer la verdadera personalidad de los candidatos, enhorabuena.
Campañas con valores, con propuestas serias y concretas que no desvirtúen la verdadera forma de hacer política, esa que hace mucho tiempo perdimos.