PRONTO SE VERÁ PELÍCULA EN LOS CINES
Lupe Benites, cineasta paeruana, ha decidido realizar una película que trata acerca de una historia en las montañas de la región San Martín. En el siguiente texto, Lupe nos cuenta el proceso creativo por el que pasó para crear esta obra:
En el año 2012 se da inicio a esta gran historia que surge entre las montañas y los sueños. Conocí a Orlando, un personaje que vivía con a la esperanza de liberar a todos los animales del cautiverio y retornarlos a su hogar de origen; ese fue el punto de partida y de ahí nace la inspiración para imaginar una película que hoy está a punto de volverse una realidad. “Celeste y el pequeño sajino”, nos cuenta la historia de una niña de aproximadamente 10 años, que le gusta pasear por el bosque para contemplar a las plantas y jugar con los animales; y en una de sus salidas salva a un sajinito de una trampa puesta por un inescrupuloso cazador para liberarlo en las montañas sagradas. Para esto se vale de la ayuda de un duende mágico, protector del bosque, quien le conduce por extraños caminos. A partir de ahí se juega con la fantasía y la realidad. Celeste tratando de encontrarle sentido a un extraño viaje lleno de vicisitudes para tratar de insertar al sajinito nuevamente a su hogar. El argumento juega con el apasionamiento de Celeste y los cazadores furtivos, en escenarios naturales, y tiene una intención: la de volver a añorar en las esperanzas, los ideales y la búsqueda de un mundo mejor. Celeste y el sajino es el pretexto perfecto para tratar de comprender hacia donde nos encaminamos.
Está fuente de inspiración y la locación principal se sitúa en el Área de Conservación Cordillera Escalera, ubicado en Tarapoto, en la provincia de San Martín.
Desde el año 2009 Orlando Zagazeta, viene trabajando arduamente por reinsertar animales que han sido rescatados del tráfico ilegal. Nos comenta lo siguiente: “Cuando caminas por dos horas, no encuentras fauna, es porque se está convirtiendo en un bosque silencioso”, ya que un bosque que no tiene fauna silvestre, es un bosque muerto en vida.
La interacción de diversas especies es lo que hace un verdadero ecosistema, no solamente con una reforestación sino con la repoblamiento de animales silvestres.
Este proyecto fue impulsado desde su inicio por una Asociación llamada Cerelias que se creó en Yurimaguas en el año 2006, que posteriormente fue caminando hasta las altas montañas en Tarapoto en el 2009, uniendo alianzas con el Proyecto Especial Huallaga Central y Bajo Mayo – PEHCBM para hacer un proyecto de una Estación Biológica para el monitoreo de la Fauna Silvestre. Cerelias desde su gestión se ha ido fortaleciendo por el gran apoyo de voluntarios que son parte del gran cambio para lograr insertar animales en espacio de área de conservación, sean ellos quienes logren producir un verdadero mejoramiento de las tierras empobrecidas por las constantes intervenciones humanas como la droga, la tala de árboles y la agricultura.
De ahí que este apasionado proyecto de película nació en las montañas, en un intento por crear conciencia, por una lucha y una convicción por hacer realidad una respetuosa armonía entre la vida silvestre y el hombre. Seguimos caminado por ese sendero para verlo pronto en las pantallas grandes.