Yurimaguas. Sin duda el triunfo de Fernando Meléndez Celis en las urnas, el domingo 5 de octubre, es inobjetable por la decisión mayoritaria de la ciudadanía de acuerdo al orden democrático.
Fernando Meléndez, es natural de Yurimaguas, por cumplir 42 años de edad el próximo 15 de noviembre, de profesión administrador de empresas, como se ve, es evidente que en la región, ya se respira aires de descentralización en la elección de nuestras autoridades, pues los pueblos le Loreto le adjudican el cargo más importante, como cualquier iquiteño o de otro distrito de la provincia de Maynas, quisiera tener.
Es que Meléndez no se eligió solo, no ha sido designado en un puesto de confianza por un jefe directo, fue el pueblo quien ubica en la presidencia regional mediante sus votos, por lo que es indiscutible esa decisión democrática, cansado de tanta información sobre hechos de corrupción visibles o invisibles en la actual administración regional.
Un triunfo en primera vuelta que abre una serie de expectativas de cambios, mejoras en la atención de los múltiples problemas de Loreto, sobre todo en educación, salud, vivienda, social, forestal y fauna, y sobre todo, laboral.
El slogan de campaña de Meléndez fue: “MIL, Gobierno de oportunidades”. Que sea pues la primera oportunidad en la región, que los loretanos respiremos aire puro y descontaminado de tanto uso y abuso del poder, de corrupción y favorecimientos bajo la mesa a grupos de poder empresarial, como siempre se ha conocido.
Meléndez, dijo que todo va a cambiar, Loreto votó por eso, porque en Iquitos, la gente no se vea perjudicada con una obra de alcantarillado que no funciona; por un servicio adecuado de agua y desagüe; por un Yurimaguas que goce de los servicios básicos de calidad, por reactivación del aparato productivo que permita generar movimiento económico favorable en los hombres del campo, porque los jóvenes tengan oportunidades de preparación académica técnica, con el ofrecimiento de los senatis populares; porque el precio del balón de gas baje y sea más accesible para las amas de casa; porque se atienda la necesidad de vivienda y la integración vial y energética de los pueblos.
Un yurimagüino, con todos los golpes y atribuciones nefastas mal intencionadas que de nada sirvieron, pues los sondeos develaban su investidura, se convierte en el tercer presidente regional de Loreto, tras la dación de la Ley 27862, Ley Orgánica de Gobiernos Regionales y la primera convocatoria a elecciones regionales en el año 2002. (Róger Torres Chujutalli)