Entrevista con Zuliana Lainez, Presidenta de la Asociación Nacional de Periodistas de Perú
“Durante el proceso electoral como ANP, nosotros hemos afirmado que la prensa concentrada no ha garantizado el debate público, como organización histórica hemos denunciado la concentración de medios y el impacto que tiene en temas de pluralidad, los 22 dirigentes que estuvieron en la reunión con el presidente Castillo son testigos”, en otra parte del dialogo sobre los medios nacionales señala: «Wilax no hace periodismo y no se puede amparar en la libertad de expresión» afirma la dirigente nacional.
¿Tu balance de la reunión con el presidente Castillo?
Positivo, porque creo que en algo coincidimos con el presidente de la república, que es cuando no atendió y nos dijo: esta reunión debió hacerse mucho tiempo, y es que él ya había tenido la oportunidad de reunirse antes con el empresariado de medios, pero que necesitaba escuchar las voces de los periodistas más como en caso de la ANP que son las voces de los periodistas locales y de medios nacionales, que es el fuente y radiografía de todas las dificultades que hay sobre la actividad periodística especialmente en lugares lejanos a la capital de la república que la tiene la ANP, el presidente dijo: “esta reunión debimos de haberlo tenido hace mucho tiempo y por eso digo que es positivo, que la hayamos tenido. Una cosa que le abordamos a gobiernos anteriores en medio de la pandemia, nosotros habíamos solicitado dialogar, con Vizcarra, Sagastegui, que volteen la cara a los medios de las regiones que se han llevado la peor parte, porque han tenido que pagar la factura más cara durante la pandemia, muchos han tenido que cerrar porque ni siquiera podían pagar la concesión, pero necesitábamos que les traten como un servicio esencial.
¿Existe una relación tensa entre el presidente y los medios generados por una serie de contradicciones y errores del propio gobierno, el presidente Castillo no ha ofrecido una sola entrevista?
Correcto, una de las primeras cosas que él nos señaló empezando la reunión dijo: soy consciente de no hablar con la prensa y no dejo en la incógnita “ya se entenderán las razones” entonces tuvimos como percepción, que esas razones podían tener que ver incluso con un tema personal, porque es consciente y nos dijo que tiene que tener una mejor relación con la prensa, nosotros le dijimos de entrada que el comité ejecutivo de entrada tenía claro que no era una visita protocolar, que era una reunión de trabajo y lo primero que le hicimos saber, es que la prensa tiene un deber vigilante y que los periodistas tienen el deber, una función vigilante y que nuestro papel va a ser de vigilancia; en su condición de jefe de estado y quienes le acompañan en el poder ejecutivo tienen que ser conscientes que las relaciones entre prensa y quienes detentan poder político muchas veces va a ser tensa, el periodista investiga, más bien ellos deberían aprovechar buena parte de esa investigación que se hace para corregir errores, por ejemplo en la designación de funcionarios o en la adjudicación -dependiendo de los niveles de gobierno de determinados proyectos y obras- que muchas veces ante la poca institucionalidad que pueda tener el Ministerio Público y la dependencia de la Policial, es el periodismo con la investigación que saca a la luz cosas que son contrarias al interés público y de la ciudadanía, eso se los hicimos ver y si él no corrige eso, la relación va a seguir siendo profundamente tensa, incluso una de las propuestas concretas que le hicimos, que creemos que tuvo buena acogida y veremos si con el devenir de los días logra implementarse, es que, así como vimos que era muy afecto a decir “que la prensa concentrada en Lima juega su papel lo que quiero hablar es con los periodistas que están en las regiones”, nosotros le propusimos que se implemente ruedas de prensa periódicas en las regiones para dialogar con los periodistas de provincias, que no se repita lo que hemos visto en otros gobiernos donde el jefe de estado y funcionarios o el consejo de ministros viajan a las regiones y prácticamente discriminan a la prensa local.
Pero también debemos de ser claros, tenemos medios que confundieron el género periodístico de la opinión con el de la información, que se debe practicar con rigor y equilibrio, tenemos medios de comunicación y periodistas convertidos en una verdadera caricatura. ¿Confusión antojadiza, interesada, torpe, que puso en evidencia el carácter autoritario de los sectores medios y altos de nuestro país que controlan los medios y las áreas de prensa de los mismos, donde la democracia es solo una palabra vacía?
Yo lo que te podría asegurar es que la ANP ha sacado más de un pronunciamiento con nombre y apellido, creo que como organización somos una de las pocas organizaciones que habla de la prensa concentrada y se lo dije con documentos la misión de la Unión Europea y de la propia OEA en la segunda vuelta, nosotros tuvimos ocasión de reunirnos con ellos para presentarles un informe del balance de la actuación de los medios durante la primera y segunda vuelta y parte de informe a la Unión Europea cita textualmente del declaraciones de la ANP, nosotros hemos dicho que la prensa concentrada no ha garantizado el debate público, es más en el documento que le hemos presentado al presidente de la república, lo primero que dijimos como organización histórica que ha denunciado la concentración de medios y el impacto que tiene en temas de pluralidad y cuando le hablamos de la vigilancia los 22 dirigentes que estuvieron en la reunión son testigos, le dijimos vigilancia desde los medios si, lo que no podemos hacer desde los medios – y en esto hablo de la televisión de alcance nacional inicialmente- , lo que no podemos ser es obstruccionistas y se lo pusimos así en el documento; no sólo como lo fueron en campaña sino incluso ahora en los primeros meses de gobierno, vigilancia si, obstruccionismo no, y eso si yo te lo puedo asegurar que la ANP no ha guardado silencio, más bien quizás muchas veces incluso ha generado varios desencuentros con organizaciones que representan al empresariado mediático en Lima pero no hacerlo sería faltar respeto a nuestro deber histórico, si no reconocemos algo que ha sido palpable en la segunda vuelta electoral y es que los medios no han garantizado el debate público; nadie juzga que un medio pueda tener una línea editorial, presupuesto que la tengan, pero esa línea editorial, que debe quedarse en los editoriales, en las partes de opinión, no puede generar un desequilibrio o desbalance, pero además, en eso hablo de los canales de televisión de señal abierta, no pueden terminar desinformando (…) terruqueando a todo aquel que se oponía a la opción predilecta del canal, como es el caso de Willax , la ANP ha dicho sin tapujos, Willax es una máquina de desinformación, Willax no hace periodismo y no se puede amparar en la libertad de expresión, no se puede apoyar que un conductor de televisión salga con arma en mano, se de juguete o real, no se pueden proteger en el discurso de libertad de expresión, porque eso es incitación a la violencia.
¿Es decir, de tener en claro y no confundir libertad con el libertinaje, a la vez para influir en negociados, en esa línea de conducta institucional defender y sostener una línea de conducta moral ante la ciudadanía, internamente también?
Correcto y eso es el salvavidas del periodismo, necesitamos crear esa corriente de buen periodismo, un periodismo que fiscalice, que no se convierta en un actor político para defender intereses fundamentalmente de los propietarios de los medios de comunicación que claman libertad de prensa, por ejemplo aquí en Lima se quejaban de las condiciones indignas de los reporteros que cubren información en palacio, pero no suelen hablar de esa otra situación indigna de las condiciones laborales que mantienen a muchos de los reporteros y reporteras. El presidente se ha comprometido en implementar la sala de prensa en palacio de gobierno con sus protocolos de seguridad para que los periodistas, pero también exigimos que los dueños de los canales de televisión y medios en general cumplan con sus trabajadores otorgándoles condiciones laborales dignas.