Las autoridades involucradas en el tema se lavan las manos, se tiran la pelota entre ellos y nadie asume responsabilidades.
Peligro sobre dos ruedas. Osinergmin, el Ministerio de Transportes, de Trabajo y los municipios no asumen funciones en la distribución del gas doméstico que se da en motocicletas y bicicletas. El 75% de locales de venta son informales en el país. -Solo necesitas tener licencia de conducir para moto. Nada más.
Ese fue el único requisito que, en la mayoría de casos, se exigió al vendedor para trabajar como repartidor de balones en diversos puntos de venta de gas doméstico que pululan por la ciudad. No existe un seguro médico para él y los clientes en caso de que ocurra un accidente en los domicilios; ni mucho menos le ofrecieron implementos de seguridad. Nada de eso. Lo único que le garantizaron es que le iban a dar una motocicleta –acondicionada– para llevar hasta cuatro cilindros de Gas Licuado de Petróleo (GLP), como si fueran cajas o bolsas de compras, y nada más.
Este episodio describe la gran informalidad que desde los últimos 20 años ha ido agravándose en la cadena del suministro del gas de uso doméstico, sobre todo en la etapa de distribución y comercialización.
En Tarapoto y otras ciudades de la región la historia es igual, basta recorrer las calles para evidenciar que los distribuidores de gas doméstico trasladan los balones sin el cuidado mínimo de seguridad, situación que se está convirtiendo en una bomba de tiempo, sin que sea tomada en cuenta por los organismos supervisores.
Los motociclistas que transportan balones de gas lo hacen con las válvulas hacia abajo, todo depósito a presión debe de ir parado, tampoco pueden ser transportados en motocicletas, porque una chispa en un posible accidente de tránsito, podría ocasionar una fatalidad.
Otro aspecto a tomar en cuenta es el estado y la antigüedad de los balones de gas, muchas veces corroídos lo que puede genera fuga de gas.
ASÍ FUNCIONA EL CÍRCULO VICIOSO
Según el Decreto Supremo 27-94/EM, Osinergmin se debe encargar de autorizar a los distribuidores de GLP, ya sea a granel o en cilindros; además que tiene que supervisar el comercio de hidrocarburos en todo el país.
Sin embargo, Osinergmin precisó que solo tiene competencia para fiscalizar a los camiones y cisternas, mas no a los vehículos menores, como las motos y bicicletas, que realizan el servicio de delivery de balones de gas.
Osinergmin respondió también que, según la Ley Orgánica de Municipalidades, es función de las comunas regular y controlar la circulación de vehículos menores. Asimismo, indicó que el Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC) es responsable de aprobar y certificar las modificaciones que se les hacen a estas unidades. Esto con respecto a la instalación de canastillas en las motos.
A su vez, el MTC aseveró que es Osinergmin quien autoriza, fiscaliza y supervisa las actividades de transporte de hidrocarburos; no ellos. De esta manera, la responsabilidad de fiscalizar las motos y las bicicletas que llevan balones de gas recayó en Osinergmin.