24.8 C
Tarapoto
jueves, abril 25, 2024

Todo es distinto

Era normal mi urticaria en estas rechas, no quería villancicos, mucho menos adornar la casa, los regalos por compromiso y la comelona hasta terminar en empacho, sin embargo, siento que este año todo es distinto.

Han sido 12 meses intensos, entre correteos para hacer alcanzar el dinero, para sobrevivir sin trabajo y para evitar morir con el virus.

Fue un año caótico en donde se desconfiaba de todos y mientras más lejos, todo estaba mejor. Esconderse fue una opción y así varios sobrevivimos  a esta pandemia.

Esta navidad debería ser distinta, de agradecimiento por nuestra familia que está sana, por la dicha de haber sobrevivido a esta crisis. Debería ser una fecha para poner una vela y rezar por todos aquellos que partieron a consecuencia del Covid y por sus familiares que aun lloran su ausencia.

Todo el país y el mundo, debería hacer un stop y dejar de derrochar dinero en decoraciones, en costosos regalos o en cenas lujosas, ese dinero podría ser destinado a los más necesitados, a aquellos hogares en donde los niños no tienen ni un pan para comer.

Dejemos esa hipocresía de comprar un regalo solamente para quedar bien, cuando en realidad no se tiene ni una pizca de buenos sentimientos para esa persona. Dejemos de envidiar al resto y centrémonos en nosotros, en ser mejores seres humanos.

Esta pandemia nos debería dejar una lección de vida, de entender que la salud y la familia es lo más valioso y que el resto está demás. Ni todo el billete del mundo nos salva de la muerte y que tener una familia unida puede ser la mejor medicina.

Un día como hoy estaremos en noche buena, en vísperas al nacimiento de Jesús, cenaremos algo rico en casa, abrazaremos a nuestros seres queridos, por eso, te propongo que hagamos un espacio y dediquemos una oración para las familias vulnerables, por aquellos niños que tienen que dormir temprano para no tener hambre, para que soñar les dé un poco de alegría, porque la cruel vida que les tocó tener puede ser amarga.

Dediquemos también un tiempo al personal de salud, a aquellos que nos dedican desvelos y que están tan cerca a la muerte y que muchas veces son violentados por personas que no reconocen el trabajo que realizan.

No pretendo dar una clase de cómo ser mejores seres humanos, pero sí quiero contribuir para hacer de estas fechas, un momento preciso para abrir nuestro corazón y a dejar de ser egocéntricos, para volvernos humanos, con sentimientos, con alma.

Dolor y esperanza.Estos son los sentimientos que debido a la pandemia, caracterizan estos días antes de navidad. El año 2020 está llegando a su fin, un año marcado por el sufrimiento, pero también por el compromiso de tantas personas que ayudan a los que sufren.

Sé que no podemos cambiar todo, pero estoy segura que nada será igual, no sabemos con qué sorpresas se viene el 2021, por eso esta navidad llénate de esperanza y transmite eso a los que tienes cerca.

Podemos cambiar nuestras perspectivas y eso hará que el año que viene sea más brillante con esa luz de esperanza, solidaridad y alegría.

Todo es distinto, hagamos que el cambio sea para mejor…

Artículos relacionados

Mantente Conectado

34,537FansMe gusta
271SeguidoresSeguir
1,851SeguidoresSeguir

Últimos artículos