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jueves, marzo 28, 2024

Travesuras de una niña mala

“La niña mala” permaneció como un paradigma del egoísmo y sobretodo del arribismo. Significa una clara inversión del código machista dentro del mundo social, pues vemos a un hombre completamente sometido a la voluntad de una mujer.

“Se dedicó a mí en cuerpo y alma”, “Se me quedó mirando con una carita de mosquita muerta”, son algunas de las frases utilizadas por Vargas Llosa en la novela literaria “Travesuras de la Niña Mala y que ahora van revelándose en la actual situación política del Perú. ¿Por qué?, claro está, mediáticamente por la exposición de Karem Roca, la “íntima” hace unos días del presidente Vizcarra.

Hay un cierto aroma a perfume de mujer cuando el manejo del movimiento político se hace y se deshace y esto me trae a la mente las presentaciones de Nadie Heredia, aquella que tenía un liderazgo natural, y donde tener en ese entonces un presidente “calzonudo” no tiene importancia, desde el punto de vista de Humala.

Hoy nuevamente se siente los tacones bulliciosos en palacio de gobierno, ya no de una primera dama con ansias de ser presidente de la República, ésta vez la historia es de despecho, de una mujer que dejó de ser la engreída del “presi”, de una mujer que tenía que compartirlo en el trabajo con la nueva preferida, Miriam Paredes y que no le quedó otra que volverse la antagonista de la novela.

Así como la novela de Vargas Llosa, donde se presenta una relación tormentosa y enfermiza de dos amantes durante cuatro décadas con el trasfondo de los tumultuosos cambios políticos y sociales que se vivieron en la segunda mitad del siglo XX. En nuestras páginas amarillas del Perú, se plasma varios sucesos bochornosos, en donde reina audio tras audio y que de por medio hay un tufo a resentimiento de mujer engañada y un “swing” que va perdiendo el compás.

¿Cuál es el punto?, el punto es que tenemos un problema que ha puesto de cabeza a palacio de gobierno y a todo el país, dejando fuera de protagonismo al Covid 19 y poniendo en portadas a Karem Rocca y Richar Swing. Un problema que ha desestabilizado los poderes del Estado. Por una parte el congreso pidiendo moción de vacancia del presidente de la República, por otro lado, una ex asistente queriendo sostener su mentira y a un gobernante que tiene las agallas de enfrentarlos y decidir culminar con su mandato, que para mí, ha sido admirable, porque asumió problemas políticos, eliminó un congreso, batalló con la pandemia y lo hizo un ser humano al que no elegimos democráticamente. Quizás falló en algunos aspectos, pero no como para querer crucificarlo como a Jesucristo.

Karem, la niña mala, que en video conferencia pone “carita de yo no fui”, ha causado polémica no solo en el país, sino en todo el mundo. Esa niña mala recién se da cuenta que se ha portado mal y en un audio se pregunta “¿Es un delito grabar al presidente?”. Con total frescura y con esa inocencia que intenta vender a todos los peruanos.

Ante un Perú canceroso, la posibilidad de tener un Estado democrático con políticos honestos, se siente lejano. Los peruanos estamos cansados de los excesos en la política, de esos melodramas sacados de guiones de telenovelas mexicanas y que siempre terminan teniendo protagonismo en la coyuntura social y que desvía la atención de la población.

Son las travesuras de una niña mala lo que están empeorando el cáncer político peruano. El pueblo eligió a presidentes que nos han decepcionado y esto todavía no tiene cuándo terminar.

Si el Perú fuera una telenovela de mal gusto, Karem Roca sería la intrigosa que busca quitar el novio a su mejor amiga y que quiere llegar a la cima pisoteando derechos ajenos y duplicando los propios. Felizmente, todavía el Perú no es una telenovela, no nos importa que sea la “Amiga del Gobernante”, la “Protagonista del audio” o de pretender ser la “Embajadora del complot”. Lo que queremos es que el show termine con swing o sin swing.

Necesitamos cambios en el Perú, no telenovelas repetitivas y cansadas. Ya tuvimos varias y sin finales felices. Humala y Nadie estuvieron en la cárcel, “El cholo sagrado” sigue sin ser extraditado de los Estados Unidos, Alan García se suicidó, PPK sigue con arresto domiciliario y del “Chino”, ni qué decir.

Existen mujeres buenas a los que pocos tienen en cuenta. Sin embargo, las malas que hacen travesuras, abundan por todos lados y terminan convirtiéndose en esa miel que endulza, empalaga y que en exceso podría generar un coma diabético….

Y tú…¿Eres una niña buena o mala?

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