El Estado peruano, perdería soberanía sobre sus decisiones
Internacionalizamos la solución de nuestros conflictos internos.
En las próximas semanas, el Congreso de la República, revisará, para su ratificación, o no, el documento Acuerdo de Escazú, llamado así porque fue adoptado en esa ciudad, en Costa Rica.
Es un acuerdo de naturaleza medioambiental que se circunscribe a la amazonía de toda esta parte del continente, lo que busca es establecer mecanismos por parte de todos los países firmantes, para que los ciudadanos puedan tener acceso a información medioambiental, para que los ciudadanos puedan tener participación en asuntos medioambientales y para que los ciudadanos, los privados y el estado puedan encontrar mecanismos en toma de decisiones en materia de justicia y administrativa.
Todo esto no debería preocuparnos mucho si es que todos actuaríamos con razonabilidad, pero el asunto es mucho más delicado de lo que imaginamos.
En primer lugar, si hablamos de amazonía estamos hablando del 53% del territorio nacional.
En segundo lugar, la firma o ratificación de este acuerdo, que es un tratado internacional, implica, entre otras cosas, que las decisiones que se tomen, ya no será únicamente que terminen en sede nacional, sino el mismo acuerdo establece la posibilidad de acceder a la justicia dictada por la Corte Internacional de Justicia. Es decir, internacionalizamos la solución de nuestros conflictos internos.
Me preocupa, además, el hecho de que eso implicaría automáticamente, la afectación de la economía en toda la amazonía del Perú; porque a través de la ratificación de este acuerdo, quedaría inhabilitada, la posibilidad de que cualquier ciudadano, cualquier grupo de personas, cualquier ONG, cualquier asociación, pueda inmediatamente objetar la participación del Estado o de los privados, en cualquier tipo de inversión que ellos consideren que afecta el medioambiente. Podría afectar la inversión pública, en materia petrolera, por ejemplo, o en materia de gas, pero también podría afectar la inversión privada en materia de agricultura, ganadería, agroindustria, turística, los hoteles.
Cualquier cosa, que ellos piensen que podría afectar al medio ambiente, podría inmediatamente ser afectado a través de estos mecanismos, primero para una decisión interna y finalmente por una decisión internacional. El Estado peruano, como Estado, perdería soberanía sobre sus decisiones, porque ya no es la última, en la medida que esto se ha internacionalizado.
Y preocupa, no solamente la afectación económica que podría inmediatamente ocurrir, con respecto a las nuevas inversiones en la amazonia, que se necesita, siendo la nuestra una región pobre; sino también con respecto a las inversiones que ya existen de gente que en este momento opera en la amazonía y que genera miles de puestos de trabajo, de los cuales viven la mayoría de las familias de la amazonía.
Todas esas inversiones, podrían quedar inmediatamente en entre dicho inmediatamente, y sometidas a estos procedimientos de información, de fiscalización, de debate, finalmente decisiones administrativas y jurisdiccionales.
Preocupa, además, que, llegado el momento, internacionalizado el conflicto la decisión final, recaiga en grupos que han demostrado, a los largo de todos estos años, que tienen un sesgo ideológico muy marcado en contra de la inversión privada e inclusive de la inversión del Estado en determinados aspectos, porque es un grupo de defiende sus propios intereses, acostumbrados a ser financiados por organismos internacionales, a través de la llamada, cooperación internacional o de ONGs de carácter internacional, se oponen de cualquier tipo de participación en nuestro país, en algo que ellos puedan indicar que afecta al medioambiente so pretexto de defender a la población, se oponen a todo, perturban la inversión y perjudican la economía nacional.
Estos grupos operan, a nivel internacional, con fuertes lobys y fuerte presencia y con jueces que han sido básicamente formados por ellos mismos. Por eso me opongo al acuerdo de Escazú.
Pérdida de nuestra soberanía sobre el 53% de nuestro territorio amazónico. Atentaría contra el desarrollo de la mayoría de las familias. Me preocupa que sea un grupo ideologizado quien toma las decisiones.
No estoy en contra de cuidar el medio ambiente, exijo que toda inversión privada se haga cuidando el medio ambiente.