Las ferias agroindustriales que se llevan a cabo en los distritos de Cuñumbuqui y Zapatero son un extraordinario ejemplo de que el verdadero desarrollo del sector agrario está en las manos de los mismos productores. Y que el Estado debe cumplir el verdadero rol de acompañante en todo este proceso, pero no al margen de esa falacia de lo “subsidiario” con el que los neoliberales llegan a sus orgasmos. Y es importante el rol de los gobiernos locales que son los que deben dirigir estos procesos, de lo que llamamos el desarrollo local y el aprovechamiento de las potenciales de las localidades, concepto que nace en la literatura, en una conocida obra de Honorato de Balzac, como deben saberlo los intelectuales.
Somos testigos del entusiasmo de los productores participando con fe en todas estas actividades. Hemos vistos rostros y expresiones exultantes y alegres de todos ellos, así como de los visitantes en estas ferias que han concitado el interés general en un proceso de intercambio adquiriendo los quesos artesanales, los productos elaborados a base de cacao en todas las presentaciones, algunas francamente innovadoras que nos hace renacer la fe en que se pueden lograr muchas y mejores cosas cada uno cumpliendo sus roles en el papel de socios y “no usuarios y beneficiarios”, como lo dice con bastante precisión el ingeniero William Boris Gallegos Mendoza, porque, ¡aquí está la clave de todo esto!, y no entenderlo es seguir estando en nada.
Las ferias agroindustriales de Zapatero y Cuñumbuqui son un maravillo ejemplo, y un desafío al mismo tiempo, para aceptar una realidad de que ya es hora que se trabaje bajo el principio de la sostenibilidad ambiental, y tiene que ser desde ahora y no desde mañana, bajo el marco de los diecisiete Objetivos del Desarrollo Sostenible, que es el que está impulsando el Gobierno Regional de San Martín para la aplicación de lo que se llama la Revolución Productiva, donde los principios fundamentales son la revolución de los conceptos, el cambio de paradigmas y la nueva manera de entender el desarrollo en el campo. En estos términos se expresó el Ing. Daniel Vásquez Cenepo, actual Director Regional de Agricultura, llamando la atención sobre la agresiva destrucción de los bosques, la desaparición de las fuentes de agua, etc.
Las ferias agropecuarias de Cuñumbuqui y Zapatero nos demuestran dramáticamente que los pueblos, a través de su desarrollo histórico, consolidan roles y dinámicas económicas propias. Estos roles es necesario potenciarlas y fortalecerlas. Zapatero y Cuñumbuqui han creado ya una marca, de resonancia mundial, como potencia ganadera, habiendo desplazado al Huallaga Central y Biavo, siendo necesario consolidarla y para eso se elabora el Proyecto Regional de Desarrollo Ganadero, impulsado por el Gobierno Regional de San Martín. Y su éxito dependerá de las actitudes de los mismos ganaderos, siempre que miren con concepto de integralidad el horizonte dentro del mediano y largo plazo sin pretender cosechar ventajas, oportunismos sin ética y obtener lucro inmediato.
Finalmente, en el futuro será necesario que Cuñumbuqui y Zapatero se unan en una sola feria, porque estando tan cerca el uno del otro, es un esfuerzo innecesario desplegar tantas energías y logística, pudiendo los resultados ser aún mejores. [Comunicando Bosque y Cultura].