Habiendo celebrado el “día del amor y la amistad”, vemos con alegría, que nuestra sociedad –en celebraciones generales como esta- cada vez se acerca más, a nociones que van más allá del enfoque profano, demasiado influenciado por el automatismo comercial y los condicionamientos sociales.
Profundizando con este progreso espiritual, podemos leer los excelentes aportes de grandes pensadores como Ignace Lepp en “La Comunicación de las Existencias” y “Psicoanálisis de la Amistad” o Erich Fromm: “El Arte de Amar”, Eric Berne: “Hacer el Amor” y de Perú al brillante Psicólogo Carlos Alberto Seguín en “Amor, Sexo y Matrimonio”, entre otros.
Mas aún, recomiendo especialmente los nuevos conceptos que ofrecen ilustres Maestres Dr. Serge Raynaud de la Ferrière y Dr. David Juan Ferriz Olivares, que conducen a una vivencia del amor y de la amistad, más acorde con los tiempos nuevos que, desde 1948, vivimos en la llamada Era del Saber (o era global, era atómica, era de acuario, etc.). Ellos nos indican sabiamente la experiencia del amor desde una perspectiva personal hasta la del amor universal, siempre basados en el Saber Verdadero (Jñana, Yachay, Gnosis) como columna fundamental.
Por ejemplo, el Dr. David Juan Ferriz Olivares ilustra:
“En la Era de Piscis hasta antes de 1948 y sobre todo en siglos pasados había la exaltación del dolor en lo religioso, en lo cristiano, en lo amoroso. Los enamorados se decían “me muero por ti” porque el signo del verdadero amor estaba acompañado de sufrimiento. Ahora si alguien se expresara así lo enviarían con el psiquiatra. Hay un cambio sustancial en los criterios y comportamientos sociales.”
En efecto, el amor en esta época caracterizada por el Saber conlleva toda una evolución –un “cambio sustancial”- a la cual muchas personas aún les es difícil acceder puesto que una buena parte de la mentalidad está anclada a este concepto pasado de unión entre el sufrimiento y el amor (“amar implica necesariamente sufrir” o “si no sufres por mí entonces no me amas”) concepto reforzado entre otros factores por ejemplo por las telenovelas y las baladas “románticas” de la radio que abundan en estas expresiones. Es considerado casi “de buen tono” (sobre todo en los países de Latinoamérica) relacionar las experiencias de dolor con el amor, algo que –a decir del estudio equilibrado y objetivo de las cosas- merecería una consulta psiquiátrica.
De ahí que el sabio Dr. Serge Raynaud de la Ferrière, como Avatar de esta Era, aporta una nueva dimensión del AMOR, en su sentido más sano, equilibrado y trascendental, TRANSMUTANDO el gran Pensamiento de su antecesor (Avatar de la Era de Piscis) Jesús el Cristo:
“AMAOS LOS UNOS A LOS OTROS DA A COMPRENDER: ENTIÉNDANSE, COMPRÉNDANSE, ASIMÍLENSE LOS UNOS A LOS OTROS.”
Esto último tan aplicable a las vivencias personales como a las vivencias sociales, religiosas, culturales y universales (el amor a Dios, el amor a una causa, el amor a la humanidad y el intercultural) que tanto se necesita incentivar en estos turbulentos tiempos de intolerancia y fanatismo causados por la ignorancia.
En ese sentido, el autor continúa remarcando la necesidad del estudio y aprendizaje para acceder al amor verdadero:
“Sin embargo, muchas personas afirman que todo este aprendizaje no es necesario, porque el mundo puede ser salvado por el amor. Estamos de acuerdo, pero al mismo tiempo quisiéramos preguntarles a algunas de estas personas si ellas saben exactamente de qué clase de amor se trata, pues esto sólo se alcanza con el Amor Universal que requiere una correcta comprensión entre todos los hombres de la tierra ¿Y CÓMO PUEDE EXISTIR TAL AMOR UNIVERSAL SI LAS PREOCUPACIONES DE CADA QUIEN, SU CONCEPTO SOBRE EL PROBLEMA DEL ALMA, SU IDEA CON RESPECTO A DIOS O AL ESPÍRITU NO ES COMPRENDIDA? Sí, estamos de acuerdo con esta clase de amor, cuando está animado por tan hermosos sentimientos; y como decimos nosotros los Nazarenos: ¡Que la Paz sea con Vosotros!… Por el nuevo mundo unido, por la Edad de Oro prometida en todas las profecías, por la realización del Reino de Cristo: AMAOS LOS UNOS A LOS OTROS”
Esto último, es remarcado por su único ideólogo y exégeta autorizado, el Dr. David Juan Ferriz Olivares:
“No es pues, la frase Dios es amor la que describe la aplicación de amor en la Nueva Era sino la comprensión…Hay que fortificar la necesidad de la comprensión, del entendimiento mutuo, de la asimilación de los unos con los otros, tomando en cuenta lo señalado anteriormente por el Maestre Dr. Serge Raynaud de la Ferrière de que EL MAYOR PELIGRO ES LA IGNORANCIA. LA ÉTICA EN LA NUEVA ERA DEBE BASARSE EN LA COMPRENSIÓN Y EL CONOCIMIENTO, PARA QUE HAYA UN MUNDO UNIDO POR LA SABIDURÍA.” (Ver: www.magnanet.org)
Hablando del matrimonio estos autores indican aún:
“TRATEN DE AYUDARSE MUTUAMENTE, HAY A VECES QUE HACER CONCESIONES, LA VIDA EN COMÚN NECESITA BASTANTE SABIDURÍA (…) las bases indispensables: PACIENCIA, TOLERANCIA Y EQUILIBRIO.”
“Que cada uno comprenda y asimile bien la misión suya y la de su pareja para evitar los “matrimonios al vapor, esos que empiezan con un flechazo y ya…”