Los desperdicios son tan antiguos como la historia de la humanidad. Desde que el ser humano apareció en la Tierra, comenzó a dejar sus desperdicios donde mejor le parecía. Actualmente, los desechos que diariamente genera la actividad humana se pueden hallar hasta en los lugares más apartados del planeta, e inclusive en sitios insospechados, como la Luna.
Realmente es muy preocupante este tema al ver nuestro alrededor y darnos cuenta de la realidad. Todos los días transitamos de un lugar a otro y nos sorprende ver como estos desperdicios se encuentran diseminada por todas partes, abarcando desde papeles, latas, bolsas, trapos, restos de comidas, plásticos, en donde se nota claramente, por un lado, la falta de cultura ambiental del ciudadano y, por otra, la ineficiencia de los organismos del Estado en la recolección diaria de estos residuos.
Esta falta de cultura ambiental en las personas está trayendo grandes estragos a nuestro planeta. Se calcula que cada persona en el mundo produce un promedio de 1 Kg. de basura al día que, multiplicado por la población actual, sabremos en promedio las grandes toneladas de residuos que son arrojados diariamente en cualquier lugar.
Esto está causando mucha preocupación en nuestras autoridades y toda la población, de tal manera que se está doblegando esfuerzos para poder controlar y disminuir este caos, pero el crear botaderos a cielo abierto, rellenos sanitarios, pozos de oxidación, centros de combustión, etc. ¿creen que es la mejor forma de dar solución a este dilema? Estas “soluciones” que aplican nuestros países subdesarrollados no son las mejores alternativas si se desea progresar y dejar un legado a las próximas generaciones.
Hoy sabemos que existen procesos para reciclar estos materiales que nos permitirá ahorrar y salvar enormes cantidades de recursos, conservar y proteger el medio ambiente, reducir nuestros desperdicios dándolo un valor real y, al mismo tiempo, generando empleos para la población pues, la basura se está convirtiendo en un negocio rentable. Solo al año la actividad del reciclaje factura más de 24 mil millones de dólares y genera más de 25,000 empleos directos , actividad que en nuestro país recién está dando sus primeros pasos, como ya lo hacen en muchos países de Sur América.
El reciclaje quedaría en nada si no fuera por el principal motor que da vida a esta actividad, como son “las plantas de reciclaje” y, en muchos otros casos, la buena gestión de los organismos estatales. Estos residuos que se depositan en estas plantas pasan por diversos procesos: desde su recolección y selección, hasta su conversión a materia prima, para luego ser llevado a las fábricas donde pueden ser convertidos en nuevos productos.
Nuestra región no debe estar ajena a esto. Tenemos toneladas de basura que son arrojados diariamente en el botadero municipal de Yacucatina, que se debería aprovechar, generar fuentes de ingresos con ellos como materia prima de las industrias nacionales e internacionales. Esta solución nos permitiría crecer como sociedad, conservando valiosos recursos para el futuro.