Graciela Tuanama Pizango, es el nombre de una abuela que tras la muerte de su hijo se dedica a criar a sus cuatro nietos, es por ello que todos los días recorre la ciudad para recolectar botellas descartables para venderlos en los recicladores, por esa labor solamente gana dos soles diarios, la población tarapotina ya le conoce y le brindan apoyo.
Todos los días Graciela con cuatro costales recorre las calles de la ciudad para conseguir diez kilos de enveses descartables que los vende a siete soles, ayer fue encontrada en el barrio Suchiche por las integrantes de Manos Unidas, quienes le entregaron dos canastas de víveres como parte de la celebración por el Día de la Madre.
“Es la única manera de ganarme la vida, ya que a mi edad nadie me da trabajo, todas las mañanas salgo de mi casa que está ubicada en la asociación de vivienda La Victoria, mis nietos esperan por mi” manifestó Graciela Tuanama al momento de recibir sus canastas de víveres que fueron donadas por comerciantes del mercado Tres.
Mirian Pinchi Daza, presidenta de este colectivo de mujeres manifestó que pensaron en Graciela Tuanama, porque conocen su caso y saben que trabaja muy duro para sacar adelante a sus nietos. Hace tres años el hijo de la trabajadora mujer, murió a consecuencia de cáncer al pene. (Hugo Anteparra)