LE DIERON EL ÚLTIMO ADIÓS
El cortejo fúnebre con los restos de la extinta abogada Verónica Infante Mendoza, partió ayer a las diez de la mañana con dirección a la Municipalidad Provincial de San Martín, donde laboró más de tres años como asesora legal, el féretro fue llevado en hombros por el alcalde Walter Grúndel Jiménez, junto a su novio Erick Roca Varela, el regidor Manuel Nieves Pinchi y Jorge Nakamura Villacorta, amigo de la fallecida.
A petición de los familiares, el cuerpo de Verónica Infante, fue trasladado a su domicilio, ubicado en el jirón Atahualpa de La Banda de Shilcayo, donde permaneció más de media hora.
A las once de la mañana el féretro fue conducido a un cementerio privado, la carrosa fue manejada por el novio de la extinta abogada.
Cerca del mediodía los restos de Verónica fueron recibidos por amigos y familiares en el camposanto en medio de profundo dolor, sus familiares la despidieron en su última morada colocando sobre el féretro flores y pétalos de rosa, el llanto de las personas que la conocieron era inevitable.
Durante la ceremonia fúnebre un pastor evangélico la despidió con una canción que conmovió a los presentes, luego procedieron a descender el féretro a su última morada. Al final del sepelio los integrantes de su promoción del Colegio Virgen Dolora también la despidieron lanzando al aire globos de color blanco.
A través de las redes sociales los amigos de la joven abogada anunciaron realizar medidas de protesta frente al hospital de EsSalud, para exigir que la muerte de la asesora legal no quede en el olvido, ya que consideran que su muerte es por negligencia médica. (Hugo Anteparra)